La búsqueda de víctimas del edificio que se derrumbó parcialmente en Surfside, en Florida, hace justo un mes, se acerca a su fin después de que los bomberos abandonaran su labor en el lugar de la catástrofe en la que murieron al menos 97 personas.

"Es difícil creer que ha pasado un mes desde la que tal vez sea la mayor tragedia de la historia de nuestra comunidad", dijo este sábado en Twitter Daniella Levine-Cava, la alcaldesa del condado estadounidense Miami-Dade, en el que se encuentra la ciudad de Surfside.

"Aunque el lugar del derrumbe ocupaba solamente el tamaño de una cuadra en una ciudad estrechamente unida, su impacto se ha sentido mucho más allá de nuestro condado, afectando vidas en todo el mundo", añadió en un vídeo publicado en la red social.

El viernes, pusieron fin a su labor los equipos de búsqueda y rescate en el sitio del derrumbe del edificio Champlain Towers South, según anunciaron las autoridades locales. Llevaban trabajando en el lugar desde la madrugada del 24 de junio, cuando se vino abajo la torre de 12 plantas, situada frente al mar en Surfside, al norte de Miami Beach.

No encontraron ningún superviviente entre los escombros y, el 7 de julio, anunciaron que se centrarían en buscar restos humanos.

Tras la retirada de toneladas de escombros, el sitio donde se encontraba el edificio es ahora un solar vacío, en el que apenas quedaron en pie cuatro muros de las fundaciones.

Hasta el momento se han identificado 97 fallecidos, pero las autoridades creen que falta una víctima mortal por identificar, según dijo esta semana Levine-Cava.

La policía de Miami-Dade lleva a cabo la búsqueda de los restos de esa última víctima en un lugar donde almacenaron lo retirado del lugar del desplome del edificio.

Un mes después de lo ocurrido, las causas del derrumbe aún se desconocen y están siendo investigados.

Los primeros elementos de la investigación apuntan a que la estructura del edificio parecía desgastada en algunos sectores.